Érase una vez un mundo lleno de sueños deseosos de ser compartidos… En eternamente soñadoras basta con seguir la pista que nos alerta sobre la existencia de nuestros sueños para transportarnos a mundos mágicos e invitarnos a imaginar…a soñar. En eternamente soñadoras no importa la edad, sólo necesitamos ver con los ojos inocentes de la infancia y hacer realidad nuestros sueños… nuestras ilusiones. En eternamente soñadoras aparecen princesas desconocidas o injustamente olvidadas…Es posible… quizás… quién sabe si nos reconozcamos con alguna de ellas. En eternamente soñadoras a veces y sin razón alguna, aparece esa niña especial que nos sigue mirando a través de nuestro reflejo… Esa niña que nos recuerda quiénes somos, nos abraza en nuestro camino y nos regala momentos inolvidables. En eternamente soñadoras nuestro lenguaje es la danza, nuestra manera de contar lo que aflora en nuestro interior. La danza es el hilo conductor para plasmar nuestros sueños, nuestras inquietudes… nuestra inspiración para acercarnos a vuestros corazones.